El Real Madrid vuelve a estar en el centro de la escena del mercado europeo. Según informaciones recientes, la directiva blanca ha puesto sus ojos en Adam Wharton, joven centrocampista inglés que actualmente milita en el Crystal Palace y que se ha convertido en una de las revelaciones de la Premier League. Su perfil, técnico y táctico, encaja en la visión de futuro que Florentino Pérez quiere para el equipo.

Sin embargo, la llegada de Wharton no sería sencilla. El Real Madrid necesita equilibrar su proyecto deportivo y financiero, y ahí entra en juego un nombre que nadie esperaba: Rodrygo Goes. El atacante brasileño, de apenas 24 años, ha sido fundamental en las últimas temporadas, pero su continuidad empieza a ponerse en duda.

Fuentes cercanas al club señalan que la venta de Rodrygo podría ser la clave para financiar el fichaje de Wharton y, al mismo tiempo, abrir espacio en un ataque donde conviven estrellas como Vinícius Jr. y Kylian Mbappé. Esta posibilidad, aunque sorprendente, no se descarta en Valdebebas, sobre todo en un contexto donde el Manchester City y otros gigantes europeos siguen de cerca la situación del brasileño.

Adam Wharton, de 20 años, ha demostrado una madurez sorprendente en el mediocampo del Crystal Palace. Su capacidad para recuperar balones, distribuir con precisión y liderar transiciones rápidas le ha valido elogios de la prensa inglesa y la atención de varios clubes top. El Real Madrid considera que su incorporación podría asegurar el futuro del mediocampo tras la era Modrić y Kroos.

Mientras tanto, el entorno de Rodrygo observa con cautela. El jugador siempre ha mostrado su deseo de triunfar en el Santiago Bernabéu, pero los rumores de su posible salida crecen día a día.
La operación, de concretarse, supondría un auténtico terremoto en el mercado: Wharton llegando como promesa de futuro y Rodrygo saliendo como sacrificio inesperado. Chamartín vuelve a ser el epicentro de la tensión.