El cumpleaños número 25 de Vinicius, celebrado el 12 de julio, coincidió casi exactamente con el de Lamine Yamal, quien el día anterior se convirtió en el “rey” de una lujosa fiesta por sus 18 años. Una noche llamativa que agitó las redes sociales y generó duras críticas.

Pero Yamal no prolongó la celebración. El lunes 14 de julio, el joven crack del Barça se presentó puntualmente al entrenamiento, cumpliendo al pie de la letra las instrucciones de Hansi Flick: pruebas médicas, evaluación física y trabajo colectivo. Una actitud elogiada por los dirigentes catalanes, aliviados de ver a su joya combinar “cercanía” y profesionalismo.

¿El lugar elegido por Vinicius? El estadio Lejado en Vargem Pequena, en las afueras de Río de Janeiro. ¿El dispositivo? Teléfonos prohibidos en la entrada, más de 200 profesionales movilizados, seis escenarios diferentes y un ambiente “inolvidable” pensado para “divertirse a lo grande”, lejos de las cámaras.

Un evento espectacular, pensado para impresionar: música en vivo, sorpresas, invitados seleccionados cuidadosamente y, por supuesto, una multitud de modelos y celebridades brasileñas, incluyendo a su ídolo declarado… Neymar, “el rey de las fiestas”, a quien tanto Vinicius como Yamal han admirado desde sus inicios.

Sin embargo, esta demostración festiva no ha sido bien recibida en el Real Madrid. Mientras Yamal gana puntos dentro del Barça, Vinicius parece alejarse cada vez más de sus dirigentes. Y la orden repentina de Florentino Pérez de delegar por completo la gestión deportiva a Xabi Alonso suena como una advertencia disfrazada, que podría cambiarlo todo en los próximos meses.

Como guinda del pastel, Yamal ha heredado oficialmente el mítico número 10 del Barça, mostrando sus ambiciones tanto para la próxima temporada como para el Mundial 2026 con España.

En el Real Madrid, la situación de Vinicius es muy distinta: atraviesa una fase complicada — bajón en el campo, renovación estancada y, sobre todo, creciente irritación en la cúpula. Según varias fuentes, Florentino Pérez empieza a perder la paciencia y ya ha cedido plenos poderes a Xabi Alonso para manejar el vestuario, manteniendo su negativa rotunda a ofrecerle a Vinicius un salario superior al de Kylian Mbappé.

En este clima tenso, Vinicius habría decidido “responder” a su manera. Según Mundo Deportivo, ha preparado un “golpe mediático”: una fiesta de cumpleaños de dos días, destinada a hacer que la de Yamal parezca solo un calentamiento.

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