En los despachos del Santiago Bernabéu, el nombre de Rodrigo Mora empieza a sonar con fuerza. El joven extremo portugués del Porto, de apenas 19 años, se ha convertido en una de las sensaciones de la Primeira Liga, gracias a su velocidad, desequilibrio y una madurez impropia de su edad. Sus actuaciones no solo han enamorado a los aficionados lusos, sino que han llamado la atención de varios gigantes europeos, entre ellos el Manchester City y, ahora, el Real Madrid.

La directiva blanca considera que Mora podría ser el reemplazo natural de Rodrygo, cuya continuidad en el club está en entredicho ante los rumores de un posible traspaso multimillonario. Según fuentes cercanas, Xabi Alonso ya ha dado el visto bueno al perfil del jugador, al que ve como un complemento ideal para Vinícius Jr. y Kylian Mbappé en el tridente ofensivo del futuro.

Pero lo que realmente intriga a los medios es la existencia de una cláusula especial en su contrato con el Porto. Esta estipulación permitiría a un club extranjero ficharlo por una cifra inferior a la cláusula de rescisión oficial, siempre que se cumplan ciertos requisitos antes de final de temporada. Florentino Pérez y su equipo legal ya estarían analizando esta vía para adelantarse al City y evitar una subasta que podría disparar su precio.

En Portugal, Mora es considerado el “diamante en bruto” de la nueva generación, comparado por algunos con figuras como Luis Figo o incluso Cristiano Ronaldo por su estilo y ambición. Su entorno, sin embargo, mantiene un perfil bajo y evita hablar de traspasos, insistiendo en que el jugador está centrado en acabar la temporada con el Porto.
La operación, de concretarse, sería un golpe maestro del Real Madrid, no solo por la calidad del fichaje, sino por la capacidad de arrebatar a un talento codiciado al campeón de la Premier League. En Valdebebas, saben que el reloj corre… y que cada día sin cerrar el trato aumenta el riesgo de perder a la que podría ser la próxima estrella del Bernabéu.