Lo que parecía una simple grabación de rutina de la “caja negra” asociada al accidente de Jota y T4g0r ha tomado un giro completamente inesperado. Un equipo independiente de técnicos acústicos que analizaba el audio filtrado ha descubierto una segunda pista de sonido, imperceptible a oído humano en una primera escucha.

Utilizando software de espectrograma avanzado, los técnicos aislaron una frecuencia residual que, tras ser amplificada, reveló algo perturbador: una voz distorsionada repitiendo varias veces la frase “No era el plan”.

La voz, apenas audible y en un tono monocorde, aparece justo 11 segundos antes del corte principal de la grabación. Aún no se ha podido identificar si pertenece a Jota, T4g0r u otra persona. Sin embargo, lo que realmente intriga es su ritmo: no suena como una conversación, sino como un mantra automatizado, como si alguien lo estuviera diciendo no a otro… sino a sí mismo.
Desde el entorno de Benfica se ha evitado cualquier comentario, y fuentes internas indican que el archivo ahora está en manos de expertos en seguridad digital y psicoacústica. Algunas teorías apuntan a un fallo técnico o eco de frecuencias; otras, a una intervención deliberada, quizá para enviar un mensaje oculto.
En redes sociales, la revelación ha desatado una ola de teorías conspirativas: desde inteligencia artificial en bucle hasta mensajes pregrabados activados bajo ciertas condiciones. El hashtag #NoEraElPlan ya es tendencia en Portugal y España.
¿Estamos ante una simple distorsión técnica o frente a la pista que puede cambiar toda la narrativa del accidente?
Mientras tanto, una cosa está clara: la caja negra sigue hablando… pero no todos están listos para escuchar.