Lo que parecía un partido más entre gigantes del fútbol mundial ha terminado destruyendo una carrera arbitral. El árbitro del último Clásico ha sido despedido de manera inmediata por la FIFA tras una actuación calificada de “desastrosa” por medios y aficionados.

Fuentes internas del organismo aseguran que la presión fue insostenible tras las decisiones polémicas tomadas durante el encuentro, que influyeron directamente en el resultado y provocaron una oleada de críticas en redes sociales y medios internacionales.

La FIFA, conocida por su lentitud en tomar decisiones disciplinarias, sorprendió al actuar con una contundencia sin precedentes: expulsión inmediata del árbitro y retiro de su licencia internacional.
Muchos se preguntan si esta medida sienta un precedente o si simplemente es una forma de calmar los ánimos. ¿Se puede destruir una carrera por 90 minutos mal gestionados? La polémica está servida.