El inicio de temporada del Real Madrid está marcado no solo por los resultados, sino también por las decisiones de su entrenador, Xabi Alonso. El técnico vasco ha optado por una política de rotación constante, que busca mantener fresco al equipo en un calendario exigente. Sin embargo, esta estrategia ha generado un foco inesperado: la incomodidad de Vinícius Jr.

El brasileño, una de las estrellas indiscutibles del club, todavía no ha disputado un solo partido completo en lo que va de curso. En cada encuentro, Alonso ha decidido sustituirlo antes del pitido final, incluso en aquellos donde su rendimiento era brillante. La situación explotó tras la victoria contra el Espanyol, cuando Vinícius dejó entrever su malestar por ser reemplazado pese a haber sido uno de los mejores del partido.

En la rueda de prensa posterior, Alonso fue directo: “En este club nadie está por encima del colectivo. Todos los jugadores son importantes, pero lo primordial es el equilibrio físico y mental de la plantilla”. Con estas palabras, el técnico quiso zanjar la polémica, aunque sus declaraciones han sido interpretadas por algunos sectores de la prensa como un mensaje velado hacia Vinícius.
La relación entre ambos sigue siendo cordial, pero la tensión está latente. Algunos periodistas deportivos señalan que el brasileño siente que su influencia en el campo es tan determinante que ser sustituido reduce su protagonismo. A su vez, fuentes internas del vestuario afirman que Alonso considera imprescindible dosificar a sus atacantes, especialmente de cara a la Champions League, donde cada detalle cuenta.
La afición se encuentra dividida. Mientras unos aplauden la gestión de Alonso, convencidos de que la rotación evitará lesiones, otros creen que limitar a Vinícius podría cortar el ritmo de su mejor jugador ofensivo.
Lo único seguro es que este pulso entre estrella y entrenador marcará las próximas semanas. ¿Se impondrá la disciplina colectiva o el talento individual acabará reclamando más minutos?