El Real Madrid vuelve a sacudir el mercado con una ofensiva que nadie esperaba: una oferta de 100 millones de libras por el centrocampista español Rodri, pilar indiscutible del Manchester City y uno de los jugadores más influyentes de la era Guardiola.

Según fuentes cercanas a Valdebebas y confirmadas por periodistas británicos de prestigio como David Ornstein y Fabrizio Romano, Florentino Pérez quiere convertir a Rodri en el nuevo ‘cerebro blanco’. El objetivo: reemplazar gradualmente a Toni Kroos y mantener el dominio en Europa durante la próxima década.

Pero más allá del impacto económico, lo que realmente pone nervioso al Manchester City es una cláusula que Rodri habría incluido en su contrato de renovación: una “cláusula de salida condicionada” que, si se cumplen ciertos objetivos personales y deportivos, permitiría al jugador salir sin necesidad de pagar el total de la cláusula habitual, estimada en más de 120 millones de libras.

Guardiola ya habría pedido a la directiva del City blindar a Rodri de cualquier intento de fuga. Internamente, se teme que su marcha no solo debilitaría al equipo en lo táctico, sino que además podría abrir la puerta a otros cracks que también quieren protagonismo en otros clubes.
Rodri, por su parte, guarda silencio. Fuentes cercanas al entorno del jugador afirman que valora “el proyecto de Madrid y la posibilidad de volver a España como líder indiscutible”. Su entorno asegura que, si el club blanco da el paso formal, Rodri lo consideraría seriamente.
La operación, de concretarse, sería uno de los mayores bombazos del verano. Y, quizás, el primer gran paso para que el Real Madrid construya el mediocampo más temido de Europa con Bellingham, Valverde, Camavinga… y ahora, tal vez, Rodri.